Imposición a plazo fijo: todo lo que tienes que saber

Definición

Una imposición a plazo fijo (IPF) es el término técnico para referirse a un depósito a plazo fijo. Si estás pensando en invertir tu dinero en este producto bancario, te contamos todo lo que necesitas saber.

Una forma de sacarle rentabilidad a nuestros ahorros es invertirlos en activos financieros como este. Se trata de ingresar una cantidad de dinero en una determinada cuenta y, a cambio, tu entidad bancaria te dará una remuneración por mantenerlo ahí durante un tiempo determinado.

Características de una imposición a plazo fijo

Según el banco en el que la contrates y las condiciones que pactes con tu banco, puede tener diferentes características. Estas pueden ser, por ejemplo: restricciones si necesitas disponer de ese dinero antes del plazo pactado o condiciones de permanencia, lo que te dará una mayor rentabilidad.

Rentabilidad

Pactas con el banco el interés a tipo fijo que te pagará por prestarle dinero, por lo tanto, el dinero depositado siempre te generará rentabilidad.

Seguridad

Es el único producto que posee una doble garantía: no perderás el dinero que inviertas porque está garantizado, primero, por el banco en el que contratas la imposición y, segundo, por el Fondo de Garantía de Depósitos.

Liquidez

Podrás disponer del dinero que inviertes antes de la fecha de vencimiento si así lo quisieras. No perderás nada del dinero que hayas invertido con la cancelación anticipada, solo una parte de los intereses.

Elementos de una imposición a tipo fijo

Cuando contratas una imposición a plazo fijo debes tener claros los siguientes elementos:

• Fecha de comienzo y vencimiento
• Tus datos
• Los datos del banco en el que contratas este producto
• La cantidad de dinero que vas a depositar en la cuenta
• El tipo de interés fijo que el banco te va a pagar
• La cantidad que recibirás: capital e intereses