Tu sueldo, el precio del alquiler, los impuestos que pagas, las pensiones… Todo depende del Índice de Precios de Consumo (IPC). ¿Sabes qué es el o qué significa el IPC? Este índice refleja la evolución de los precios de los productos y servicios básicos que se consumen en los hogares. Dicho de otro modo: el IPC mide la variación de lo que cuesta la cesta de la compra básica y es una gran referencia para ver cómo evoluciona el coste de la vida.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) lo calcula mensualmente (puedes calcular todas las variaciones anuales desde 1961) estableciendo como base el año 2002, momento en el que se introdujeron una serie de cambios que lo hicieron un indicador más realista y adaptado a la evolución del mercado.
Previsión del IPC 2024
El IPC cerró el año 2023 con una tasa del 3,1% frente al 5,7% del 2022, gracias en parte a una moderación en el encarecimiento de los alimentos. Esto supuso una disminución del 2,6% respecto al año anterior.
En enero de 2024, sin embargo, la tasa de variación anual se situó en el 3,4%, tres décimas por encima de la registrada en diciembre de 2023. La tasa anual de la inflación subyacente disminuyó dos décimas, hasta el 3,6%, y la variación mensual del índice general fue del 0,1%.
Esta evolución se debe, principalmente, a las subidas y bajadas de precios en 2023, donde subieron los carburantes, una vez finalizada la bonificación de 20 céntimos por litro de carburante, y bajó la electricidad, gracias a la prórroga del IVA reducido del 5% en la factura de la luz y el gas.
Según los últimos datos disponibles del INE sobre febrero de 2024, la tasa de variación anual del IPC de este mes se sitúa en el 2,8%, seis décimas por debajo de la registrada en enero. La tasa anual de la inflación subyacente disminuyó una décima, hasta el 3,5% y la variación mensual del índice general fue del 0,4%, de forma que la inflación acumulada en 2024 es del 0,4%.
De estos datos, se destaca la subida del 1,6% de los precios de Transporte, hasta situarse su tasa interanual en el 2,4%, que contrasta con el descenso de los precios de Vestido y calzado del -1,8%, y una variación interanual del 1,9%.
Energía y carburantes
Según los datos recabados en el IPC de enero de 2024, parece que repostar será más barato que en 2023. Debido al descenso de los precios del butano y el propano (-10,1%), la tasa de Transporte bajó cuatro puntos por debajo de la del último mes de 2023 hasta situarse en -0,1%. Sin embargo, ya en el IPC de febrero de 2024 subió dos puntos y medio tanto por el encarecimiento de las gasolinas como por el turismo.
El gas natural se abarató en un -21% y la electricidad subió un 3,3% en enero respecto a diciembre de 2023. En febrero, y gracias a la acentuada bajada de precios en comparación con el mismo mes de 2023, se redujeron 4,2 puntos para alcanzar una tasa anual del -2,7.
Por otro lado, la factura eléctrica ha influido en los alimentos, que vuelven a subir.
Alimentos
Aunque a su menor ritmo en dos años, los alimentos suben en febrero influenciados por el componente con mayor peso en el índice: la factura eléctrica. En concreto un 5,3% interanual, una tasa 2,1 puntos inferior a la de enero. Destaca, por un lado, el abaratamiento de legumbres, hortalizas y carne; y, por otro, el constante encarecimiento del aceite de oliva, en hasta un 67% en el último año.
En febrero de 2024 se dispara de nuevo el aceite en un 5,3% respecto a enero y se convierte en un 191% más caro que en 2021.
Transporte
De un año para otro, el transporte en general ha bajado un 1,5% hasta colocarse en un 2,4% en febrero de 2024. Respecto al año pasado, en este mes ha subido el precio de los cruceros y transportes marítimos de pasajeros sube un 23,1%. Pero lo que más subió en febrero de 2024, respecto a enero, fue el metro, en un 16,6%.
Las pensiones
Como se anuncia desde La Moncloa, las pensiones suben un 3,8% como resultado del IPC medio entre diciembre de 2022 y noviembre de 2023, según lo establecido en la Ley 21/2021 de garantía del poder adquisitivo de las pensiones. Se convierte así en el tercer año consecutivo que se revalorizan las pensiones junto al 8,5% de 2023 y el 2,5% de 2022. Gracias a estas revalorizaciones, un pensionista cobra de media 321 euros más al mes que en 2018.
Esta subida llegará a más de 10 millones de pensionistas en toda España. El aumento supone más de 730 euros más al año para una pensión media de jubilación.
Correos
Igual que pasó en 2019, el sello de Correos vuelve a encarecerse. Las cartas y tarjetas postales normalizadas hasta 20 gramos suben su franqueo en 4 céntimos en sus envíos a destinos nacionales respecto a los 0,78 euros del año anterior. Para países europeos, incluido Groenlandia (excluido Albania, Armenia, Bosnia, Chipre, Georgia, Malta, Moldavia y Rusia), aumentan en 5 céntimos.
También, indica Correos, se mantiene su tarifa con respecto a 2023 en el resto de los destinos, siendo el franqueo de 2,10 euros para Australia, Canadá, Estados Unidos, Japón, Nueva Zelanda y Rusia y de 1,75 euros para el resto de los países.
¿Cómo se calcula el IPC?
Cada mes se registra cuánto cuestan los casi 500 productos que conforman la cesta básica. Para ello, el INE se pone en contacto con establecimientos de 177 municipios del país, y buscando que la muestra sea lo más representativa posible, no se tienen en cuenta liquidaciones o rebajas.
Los bienes y servicios que se analizan varían en función de los hábitos de consumo de los españoles, puesto que las costumbres de la sociedad también cambian con el tiempo. El alquiler de películas ya no se contempla, por ejemplo, y, en cambio, se han añadido a la cesta productos tecnológicos como las tablets.
Todos ellos se clasifican en doce grupos con una ponderación diferente, que depende de su importancia en el mercado. Son los siguientes: alimentación y bebidas no alcohólicas, bebidas alcohólicas y tabaco, vestido y calzado, vivienda, menaje, medicina, transporte, comunicaciones, ocio y cultura, enseñanza, hoteles y restaurantes y otros bienes y servicios.
¿Para qué sirve el IPC?
El Índice de Precios de Consumo es importante para conocer otros indicadores como la inflación, que se trata del aumento generalizado de los precios de los bienes y servicios de una economía durante un período de tiempo. Es un fenómeno realmente importante, ya que pone de manifiesto cómo varían los precios y el coste de la vida de un país. En este sentido, el IPC es el medidor de la inflación más empleado.
En segundo lugar, resulta imprescindible tenerlo en cuenta para la revisión de salarios, pensiones, primas de seguros y contratos de alquiler. Si los salarios no crecen al mismo ritmo que el IPC, se reducirá el poder adquisitivo de las personas y hablaremos de congelación salarial.
Además, el IPC permite analizar la economía de manera continuada, lo que permite al Gobierno y a las empresas privadas establecer predicciones. Esto último se conoce como Indicador Adelantado del IPC, como este que sitúa su estudio en enero de 2024.
¿Cómo funciona y cómo nos afecta?
La importancia reside en que el IPC afecta e influye en la capacidad adquisitiva. Si los precios de la cesta de la compra básica crecen a un ritmo diferente al de los ingresos, no podremos adquirir los mismos bienes y servicios, a pesar de que ganemos lo mismo.
Para que esto no suceda, el Estado y muchas empresas privadas aumentan los salarios de sus empleados a principios de año, en función de la variación del IPC del año anterior, con la intención de que el poder adquisitivo no varíe.
El Índice de Precios de Consumo es, en definitiva, una radiografía representativa de la economía y de la sociedad, ya que tiene en cuenta los productos más consumidos por la población. Además, nos permite comparar con otros países, observar cómo aumentan los precios en el tiempo y tomar las medidas necesarias para que esto no influya en nuestra capacidad adquisitiva.
Si quieres saber más sobre cómo influyen los precios en nuestra toma de decisiones en el día a día, te recomendamos nuestro post que te cuenta qué son los precios psicológicos y cómo perjudican a nuestro bolsillo.
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