Nuestras redes sociales son, prácticamente, un resumen de nuestra vida. Ya sea por los recuerdos de Facebook o los stories diarios de Instagram, allí hemos reflejado pensamientos, viajes, salidas, eventos o cumpleaños. Es decir, todos los acontecimientos más importantes se encuentran en Internet. Pero, aunque puede ser interesante recordar publicaciones antiguas o hacer scroll en el feed, en realidad esta práctica puede ir en contra de nuestra seguridad. En este post te explicamos qué es la ciberhigiene y cómo te puede ayudar a proteger tu presencia en las redes sociales.
- Qué es la ciberhigiene
- ¿Por qué es importante la limpieza digital?
- Prácticas habituales de higiene digital
Qué es la ciberhigiene
Como se puede intuir por su nombre, la ciberhigiene es la higiene o cuidado personal que hacemos de nuestra vida digital. Cuando hablamos de ciberhigiene, nos referimos a una serie de medidas y hábitos que todos los usuarios de Internet pueden y deben seguir para mantener sus datos personales a salvo en Internet.
Es decir, son un conjunto de prácticas de prevención que se realizan con el objetivo de impedir que se produzcan problemas en la seguridad online. O lo que es lo mismo, para asegurarte de que toda esa información que exponemos sin pensar (y que tanto nos gusta compartir voluntariamente) esté protegida y segura.
¿Por qué es importante la ciberhigiene o limpieza digital?
La limpieza digital es necesaria para mantener tu vida online segura y ordenada. Al hacerla de forma regular, proteges tu información personal eliminando archivos antiguos y cuentas que ya no usas, además de revisar y actualizar la configuración de privacidad. Esto te ayudará a evitar que tus datos caigan en manos equivocadas y podrás prevenir amenazas como el phishing o el malware, ya que los ciberdelincuentes suelen aprovechar las vulnerabilidades en los softwares desactualizados.
Además, la limpieza digital mejora el rendimiento de tus dispositivos al deshacerte de archivos y aplicaciones innecesarias o que tienes tiempo sin utilizar. También es importante hacer copias de seguridad de tus archivos importantes para que tu información esté protegida y disponible cuando la necesites.
Para convertir estas acciones en hábitos, es recomendable establecer recordatorios de forma automática en el calendario para cada tarea, que explicamos con detalle a continuación.
Prácticas habituales de higiene digital
Con el fin de sortear problemas de ciberseguridad, es necesario actualizar periódicamente las aplicaciones web y móviles además de los sistemas operativos, como hemos adelantado. Y es que los programas antiguos pueden incluir vulnerabilidades informáticas que los ciberdelincuentes aprovechan para hacer de las suyas.
Por eso, es indispensable tomar medidas de ciberhigiene que nos evitarán muchos disgustos.
Olvida el autocompletado
Cuando queremos abrir una nueva cuenta o perfil, muchas veces aparece la opción del autocompletado de datos si estamos en un dispositivo de uso habitual. Pero, aunque puede sonar conveniente, es mejor evitar esta opción porque le está dando a la plataforma todos los datos que están asociados al autocompletado, como puede ser tu email, número de teléfono o dirección (incluso los que, en principio, no forman parte del formulario). Mejor introducir los datos estrictamente necesarios de forma manual.
Establecer contraseñas seguras
No usar la misma contraseña para todas las cuentas y cambiarlas cada cierto tiempo, son dos de las prácticas a las que debemos habituarnos para mantener una buena higiene digital. También es importante combinar letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos en las claves y evitar incorporar datos personales que puedan descubrirse fácilmente (fecha de nacimiento, cumpleaños o iniciales de nombres).
Puede ser muy útil emplear un administrador de contraseñas que nos ayuda a gestionar todas las que tenemos en una única cuenta online para hacerles seguimiento.
No dejar las sesiones abiertas
Nunca dejes sesiones iniciadas en dispositivos que compartes con otras personas. Esto aplica a cuentas de redes sociales, correo electrónico y otros servicios en línea. Si se deja abierta, cualquier persona que también lo use puede acceder a nuestra información privada.
Utilizar la autenticación de doble factor
Existen aplicaciones como Google Authenticator para que el acceso a las cuentas tanto de correo electrónico como de redes sociales, entre otras, esté totalmente protegido con la autenticación de dos factores (2FA).
Hacer copias de seguridad con frecuencia
Es posible realizar copias de seguridad de los archivos más importantes en la nube o en un disco duro externo. Así aseguramos su protección.
Revisar la privacidad de las cuentas
No podemos olvidarnos de echar un vistazo a la configuración de privacidad de nuestras redes sociales por si debemos actualizarla, así como evitar compartir datos privados como números de teléfono o la dirección domiciliaria. Es importante además prestar atención a los permisos que se aceptan a la hora de utilizar aplicaciones móviles.
Para mantener siempre la privacidad, nuestros dispositivos deben estar bloqueados con un PIN o contraseña. También hay que tener presente el empleo de una VPN o red privada virtual cuando estamos haciendo uso de una red Wi-Fi pública.
Tener cuidado a la hora de hacer clic
Para no sufrir ciberataques, debemos esquivar los clics a enlaces de origen sospechoso o a anuncios que ofrecen dinero o premios gratis, que nos hagan dudar. Los correos electrónicos o los archivos que se adjuntan dudosos y misteriosos, hay que evitar abrirlos y descargarlos.
Utilizar una protección antivirus de calidad
Recordamos la importancia de usar un software antivirus de calidad alta para eliminar virus en el ordenador, el móvil o la tablet, así como mantenerlo actualizado.
Borrar el historial de navegación
Limpia tu historial de navegación en dispositivos públicos (incluso puedes hacerlo en los dispositivos personales de forma regular) para que otros usuarios no puedan ver en qué páginas has estado.
Dar de baja los perfiles de servicios sin uso
Si ya no utilizas algún servicio para el que nos habíamos creado un perfil o cuenta, es necesario eliminar o dar de baja ese perfil para que no se puedan emplear datos personales que proporcionamos en su día.
Limita lo que compartes
Es normal querer compartir en redes sociales esa foto que sabes que va a tener likes y que va lucir bien en tu feed. Pero recuerda que podemos compartir mucho más de lo que creemos con una sola fotografía: estamos diciendo qué hacemos, dónde estamos y con quién estamos. Esto revela información de nuestro círculo social, puede incluso mostrar dónde vivimos y dar una idea de nuestro poder adquisitivo, todo con una fotografía. Así que es mejor limitar lo que compartimos en redes sociales y hacer una limpieza no solo de las fotos actuales, sino de las fotografías más antiguas que tenemos olvidadas en perfiles que ya usamos.
Si adoptamos estas medidas de limpieza digital o ciberhigiene como parte de nuestra rutina, y somos más conscientes de la información que exponemos, podemos minimizar el riesgo de sufrir ataques a nuestra seguridad online y mantener nuestros datos a salvo. La seguridad en ABANCA es una prioridad, por eso no olvides echar un vistazo a todo lo que ofrece la app de ABANCA móvil para saber cómo proteger tus movimientos financieros e información más preciada.
Recuerda que los contenidos de este blog tienen carácter informativo. Cualquier actuación motivada por su contenido o por la interpretación de las normas a las que hace referencia deberá ser analizada de forma específica teniendo en cuenta la situación particular de que se trate.
