Qué es la infidelidad financiera y cómo detectarla

La infidelidad financiera no es tan común, pero es tan real como cualquier otro tipo de engaño. Y aunque generalmente se da más en una pareja, también puede ocurrir entre amistades, familiares o en cualquier relación donde exista un vínculo económico: familias que comparten un negocio, amistades que invierten juntas, etc. Muchas veces se pasa por alto, pero ocultar información de dinero puede minar poco a poco la confianza en la relación. Te contamos más sobre qué es la infidelidad financiera y por qué ocultar los gastos se puede considerar como una traición.

• ¿Qué es infidelidad financiera?
• ¿Por qué se produce la infidelidad financiera?
• Señales de infidelidad financiera
• Ejemplos de infidelidad financiera
• Infidelidad financiera: consecuencias

¿Qué es infidelidad financiera?

La infidelidad financiera hace referencia a la práctica de ocultar o manipular información relacionada con las finanzas personales o compartidas, para que no quede evidencia de determinados gastos, deudas o ingresos. El problema principal es la mentira y el secretismo, ya que no se trata únicamente de gastar de más, sino de hacerlo a escondidas para evitar enfrentamientos o para mantener un determinado nivel de vida sin que la otra persona lo descubra. A veces quien engaña lo hace porque teme reproches o discusiones, y decide seguir adelante sin pensar en las consecuencias reales.

¿Por qué se produce la infidelidad financiera?

Es normal que las finanzas se combinen cuando hay un proyecto de vida común y que se comparta una cuenta bancaria, por ejemplo, en el matrimonio. Por eso, suele ser uno de los escenarios donde se presenta mayor infidelidad financiera. Pero, como comentamos, existen múltiples razones y escenarios que pueden llevar a esta situación. Algunos de ellos, serían:

• Miedo a ser juzgado. Si una de las dos personas siente que sus gustos o necesidades económicas no son comprendidas, es posible que prefiera ocultar facturas o decir que gastó menos cantidad de dinero de la real.
• Falta de comunicación. No se habla con claridad sobre el dinero que se gasta, se ingresa o se ahorra. Como una de las dos personas no tiene este conocimiento financiero, la otra persona puede hacer las compras o los gastos que desee sin avisar a la otra parte.
• Diferentes formas de entender el ahorro. Hay quienes prefieren guardar cada euro, mientras que otros consideran que la vida está para disfrutarla sin poner reparo en caprichos. En este caso, es necesario hablar abiertamente y decidir si es mejor tener cuentas separadas o conjuntas para que cada persona ahorre a su ritmo y según su criterio.
• Temor a perder independencia. A veces, la persona que oculta el dinero no quiere rendir cuentas de cada euro porque busca asegurar un “colchón secreto” en caso de una posible ruptura.

Sea cual sea la causa, lo cierto es que la infidelidad financiera esconde un problema de confianza que va más allá de tener un par de billetes más en la cartera. También podría ser el síntoma de una patología, y requerir la consulta de un profesional.

Señales de infidelidad financiera

¿Has sentido que tu pareja oculta cosas?, ¿o que miente con el dinero? Claramente no es saludable mirar con lupa todos los movimientos bancarios de la otra persona. Pero a veces hay señales que pueden disparar las alarmas sobre esta posible infidelidad:

• Cuando se habla de dinero, cambia de humor. Si al comentar un gasto o revisar una factura, la otra persona se pone a la defensiva o cambia de tema con rapidez.
• Ingresos y gastos que desaparecen. Que no haya forma de revisar las transacciones porque se han eliminado correos y documentos. Así como ver un cargo extraño en la cuenta y, al preguntar, la respuesta siempre es confusa.
• No compartir la información. Ante la petición de ver las cuentas o los saldos, la persona reacciona con enfado o se niega diciendo que es “algo personal”.
• Compras inexplicables. De la nada, aparecen objetos nuevos o se menciona un gasto grande sin conocer de dónde ha salido el dinero.

Ten en cuenta que estas conductas no siempre serán sinónimo de infidelidad financiera. Ya que si, por ejemplo, se hace un regalo a la otra persona, se va a ocultar el gasto. Pero si es una situación que se repite constantemente y sientes que no tienes claridad en las finanzas compartidas, puede ser una señal de que se está ocultando información.

Ejemplos de infidelidad financiera

No siempre hace falta esconder una cuenta bancaria con cientos de euros para que se considere un engaño financiero. A veces, se trata de situaciones cotidianas que se salen de control. Además, como mencionamos, aunque lo más común es que esto ocurra en pareja, también puede ocurrir entre personas que comparten un negocio, entre familiares o entre amistades, siempre que exista ese vínculo de dinero que los una.

• Tener o usar una tarjeta de crédito en secreto. Por ejemplo, abrir una nueva tarjeta y mantenerla a escondidas para cubrir gastos que no se quieren justificar.
• Mentir sobre el precio de algo. Decir que algo costó una cantidad de euros, cuando en realidad costó el doble, solo para evitar quejas.
• Tener ahorros escondidos.
• Pedir préstamos sin avisar.
• Ocultar la nómina. Cobrar el salario mensual en una cuenta diferente a la habitual o retirar grandes cantidades en efectivo para evitar que se reflejen los ingresos reales.
• Desviar fondos compartidos. Coger dinero de una cuenta conjunta para cubrir gastos personales y luego justificarlo con explicaciones vagas.
• Prestar dinero sin notificar. Ofrecer préstamos a amigos o conocidos sin informar a la otra persona, que también comparte la responsabilidad económica.

Infidelidad financiera: consecuencias

Cuando las finanzas son compartidas, ocultar los gastos, ingresos o deudas es traicionar la confianza de la otra persona. Más allá del dinero, esto puede romper la base de honestidad que sostiene cualquier relación, ya sea de pareja, de amistades o incluso entre socios. Pero también desestabiliza las finanzas de ambas personas.

Si de la nada aparecen gastos, facturas o deudas con los que no contabas y que hay que pagar porque pueden tener intereses. O crees que cuentas con una cantidad de ahorros que en realidad no existen.

Para evitar esta situación, es importante mantener una comunicación sincera y abierta, establecer objetivos comunes, ser transparente con las cuentas y respetar a la otra persona, ya que controlar en exceso los gastos también es un signo de desconfianza y puede perjudicar la relación. No olvides que cada persona debe tener la libertad de tener sus gastos y una cuenta personal donde hacer sus gestiones, sin olvidar su responsabilidad con las finanzas compartidas.

Ahora sabes qué es la infidelidad financiera con ejemplos reales, y cómo detectarla. Si decides compartir una cuenta bancaria con tu pareja, ten en cuenta estos consejos y recomendaciones antes de hacerlo, ya que puede afectar no solo tu bolsillo sino tu relación.