El amoniaco verde es una energía renovable que cuenta con varios usos en la actualidad. A día de hoy se emplea principalmente como fertilizante, pero también es útil en otros procesos industriales.
Para aclarar todas las dudas posibles acerca de esta nueva energía renovable, te explicamos a continuación en qué consiste, cómo se produce, sus usos y todas las ventajas que tiene.
Qué es el amoniaco verde
El amoniaco es el segundo compuesto químico que más se produce de todos, después del ácido sulfúrico. Concretamente se trata de un compuesto de nitrógeno (NH3) que se utiliza sobre todo en la fabricación de medicamentos y productos comerciales, especialmente de limpieza.
Hoy en día, el amoniaco puede ser verde si se produce de manera renovable y sin emisiones de gases de efecto invernadero. Es una alternativa que sirve para almacenar y transportar la energía de las centrales renovables, además de como combustible para fomentar el avance hacia la descarbonización.
Cómo se obtiene el amoniaco verde
Para obtener el amoniaco se hace reaccionar nitrógeno e hidrógeno. Una forma de producirlo es utilizando el hidrógeno que procede de la electrólisis del agua que se alimenta por energía renovable. La combustión del amoniaco únicamente genera nitrógeno molecular (N2), agua y calor.
Así, se produce principalmente a partir de la separación de los componentes del agua y del aire por medio de electricidad verde (la que procede de fuentes renovables) y la combinación de las moléculas de hidrógeno y nitrógeno verde. Al pasar de la electricidad al hidrógeno, y del hidrógeno al amoniaco, se pierde energía, pero se trata de una forma óptima de almacenar, distribuir y transportar diferentes tipos de energía.
Principales ventajas
El uso del amoniaco verde tiene diferentes ventajas con respecto a otras energías renovables:
No suelta gases contaminantes
Este compuesto se consigue por medio de un proceso no contaminante, a diferencia de otras energías como la nuclear o el petróleo y el carbón.
Además, cuenta con una alta densidad energética por volumen (mayor que la del hidrógeno) y es eficiente. Esto tiene sus ciertas ventajas: para almacenar el amoniaco, se necesita menos cantidad que hidrógeno para hacer funcionar el motor de una embarcación marítima, por ejemplo.
Es fácil de almacenar y transportar
El amoniaco verde, en modo líquido o gaseoso, es muy versátil. Puede transportarse en bombonas a espacios de difícil acceso o almacenarse en tanques en polos industriales.
Sus costes de producción son bajos
Los costes de producción de esta nueva energía renovable son inferiores a los de otras energías, y por lo tanto es más barato producir amoniaco que hidrógeno. De una forma sencilla y un presupuesto limitado, se puede obtener a través de diversas técnicas limpias.
Tiene diferentes usos
El amoniaco puede almacenar y transportar fácilmente energía química, por lo que tiene muchas aplicaciones. Es poco inflamable y valioso para el desarrollo de otras energías renovables, como la solar o la energía eólica.
De hecho, es posible utilizar la energía eléctrica producida por el sol o el viento para conseguir el amoniaco, que se puede distribuir y almacenar en grandes cantidades y a largo plazo.
También puede usarse como un combustible al uso, en la industria agrícola y naval. Esto posibilitaría la descarbonización que plantea la Unión Europea de cara a 2050.
Aplicaciones actuales y futuras
Concretamente en la industria de los fertilizantes, en sus procesos se emplea el 80% del amoníaco que se produce en todo el mundo. Además, se utiliza en la fabricación de plásticos, desinfectantes y otros productos de limpieza, refrigerantes e incluso explosivos industriales.
El proyecto ARENHA, que lleva a cabo el Centro Nacional del Hidrógeno (CNH2) con ayuda financiera de la iniciativa Horizonte 2020 de la Comisión Europea, analiza la posibilidad del uso comercial del amoniaco verde como vector energético de almacenamiento para el año 2030.
Además, el fabricante Amogy ha presentado el prototipo del primer tractor movido con esta energía del mundo. La compañía afirma que este tractor puede mantener el ritmo de trabajo a lo largo de varias horas y multiplicar la densidad energética de una batería de iones de litio.
En España, el Grupo Ignis está promoviendo en el Puerto de Sevilla una planta de producción de amoniaco verde, que podría empezar a operar a partir del próximo 2026.
En definitiva, el amoniaco verde es una manera de ayudar en la aplicación de las energías sostenibles a múltiples actividades y fomentar el avance hacia la descarbonización de nuestra economía. Teniendo en cuenta que los precios del gas se encuentran al alza, los costes de fabricación de esta nueva energía renovable son realmente competitivos en el mercado.
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